viernes, 27 de junio de 2014

Otro escaparate más

Llevaba unos días queriendo escribir algo sobre el tema de BiciMAD, ese nuevo sinsentido que se han sacado de la manga en nuestro querido Ayuntamiento madrileño: bicis electricas para fardar por el precio por el que se podían haber comprado unas cuentas más sencillas; pago constante, desde el primer minuto, para que así no nos animemos mucho; limitación de su disponibilidad a los barrios centricos y mejor comunicados, mientras otros que tienen una orografia y una limitación de transporte público que les haría ideales para este tipo de proyectos, como es Villaverde, se quedan con el "algún día llegará".

Un despropósito, al menos para los habitantes de esta ciudad. De verdad que no entiendo esta fantochada. Hasta que de repente Fanetín me abre los ojos en un interesante artículo del que extraigo a continuación:

"El modelo de BiciMAD siempre conlleva un coste para cualquier tipo de uso (aunque sean 10 minutos) y para todo tipo de abonados, algo desconocido en otros modelos como Sevilla, Barcelona, Zaragoza, Gijón o París. Con ese cobro mínimo que plantea BiciMAD, si quieres usar sus bicicletas como medio de transporte para ir al trabajo, eso te costaría: 25€ de la cuota anual más (tomando el mínimo: usas la bici menos de 30 minutos) 20 días x 11 meses x 2 veces (ida y vuelta) x 0,5€ = 220€, con lo que pagarías al año por el uso de las bicis municipales para ir a trabajar un mínimo de 245€.

En Sevilla, hacer lo mismo te costaría sólo 33€ al año. En Barcelona 47€, Zaragoza 36€, Valencia 27€ y en París 29€ (ó 19€ si eres menor de 26 años). Ah, y en Quito o Gijón es gratis.
De todos los modelos que he visto, BiciMAD es el único que cobra a los abonados de larga duración desde el minuto uno. O sea, a los residentes de la ciudad."

martes, 17 de junio de 2014

Encerradxs

Se ha hablado mucho de la "ley mordaza" que amenaza desde el horizonte, pero ya a día de hoy la ley da mucho juego para castigar y tratar de amedrentar. No hay más que ver el caso que se está moviendo ahora de Carlos y Carmen, condenados a tres años de prisión por participar en un piquete en una huelga. Yo de verdad no entiendo cómo se justifica esta condena a nivel legal, no me entra en la cabeza... Pero no es la única, hay algunas más que vienen a confirmar que esto no es algo puntual, sino parte de una estrategia puesta en marcha. Hay diversas peticiones de indulto en marcha, apelando a medidas excepcionales ya que los cauces ordinarios no dan espacio para poder enfrentar estas injusticias...


lunes, 16 de junio de 2014

Arte de la calle

Este fin de semana se ha inaugurado la exposición "El Saber en la Calle", en la que se recogen las obras de Kururu 33, artista peruano que tras 10 años en España vuelve en las próximas semanas a su tierra natal. Como ha explicado en la presentación, "hay personas que tienen inspiración divina, mi inspiración es la calle y sus gentes". Y eso queda claro al ver sus obras, como también su condición de migrante, lo que hace que contemplar sus creaciones nos enfrente con un cuestionamiento radical de nuestra sociedad, sus maneras y sus estructuras profundas de funcionamiento. Alrededor de cada una de estas obras se podría hacer una mesa redonda, ya que nos enfrentan con nosotrxs mismxs, se ofrecen como espejo incómodo de lo que somos. Por eso merece la pena acercarse a descubrir a este artista singular. 

Acá van imágenes de algunas de sus obras:

"Son personas atrapadas por lo plástico en el sentido de que el plástico es todo lo pasajero, lo momentáneo, lo superficial."

"Es la muerte en el mar. Trata de las pateras."

"Los ojos son para que la persona que ve ahí se refleje. Sus caras son cosidas, como modeladas. Son una familia prototipo. Las cosen a propósito  para que sean un propotipo a imitar, a seguir."

 "Seres plásticos. De usar y tirar. Son gentes comercializadas. En estas bandejas suelen venir bollitos."

"Son diferentes rostros de la inmigración. Son rostros en forma de tarjetas. Ese año estaba muy de moda eso de llamar a tu país de origen lo publicitaban mucho y los inmigrantes eran los consumidores en este caso. Como el sistema busca consumidores en todas partes."

sábado, 14 de junio de 2014

Maldito mundial

Esta mañana en el metro escuchaba a un grupo de adolescentes comentando sobre el Mundial de Brasil 2014. Pero no hablaban del partido por venir, ni del jugado el día anterior: hablaban de las protestas de la población brasileña, de las miles de familias expulsadas en proceso de remodelación de las sedes, de los costes desbordados de este evento... En realidad no es algo nuevo, ya Barcelona aprovechó las Olimpiadas del 92 para reorganizar su territorio y expulsar o arrinconar a las familias con menos recursos y darse un buen lavado de cara. Cambian las formas concretas, pero no la intención última que viene animando estos eventos desde hace ya mucho tiempo. Lo interesante es que ahora parece que hay una mayor conciencia de ello. Un primer paso.

¿Quieres saber algo más?

lunes, 9 de junio de 2014

Máscaras

Un símbolo, un icono que renuncia serlo. Un movimiento que en pleno proceso de invisibilización y olvido por parte del resto del mundo decide seguir caminando de la manera más honesta posible, reconociendo las transformaciones y la vida que lo anima, compartiendo sin más lo que hay y renunciando a artificios.

Ya hace mucho que no conozco de primera mano lo que se mueve por las montañas del Sureste Mexicano, con lo que no sé reconocer la realidad que hay detrás de estas palabras. Pero lo que sí que es cierto es que al menos éstas vuelven a señalar a esos lugares incómodos y poco transitados tan necesarios para que desde ellos construyamos nuestras prácticas colectivas.

El Subcomandante Marcos se despide, reconociendo que nunca fue más que una máscara. Desde el EZLN, una vez, nos muestran un camino a seguir transitando juntxs.

"En estos 20 años ha habido un relevo múltiple y complejo en el EZLN.

Algunos han advertido sólo el evidente: el generacional.

Ahora están haciendo la lucha y dirigiendo la resistencia quienes eran pequeños o no habían nacido al inicio del alzamiento.

Pero algunos estudiosos no se han percatado de otros relevos:

El de clase: del origen clase mediero ilustrado, al indígena campesino.

El de raza: de la dirección mestiza a la dirección netamente indígena.

Y el más importante: el relevo de pensamiento: del vanguardismo revolucionario al mandar obedeciendo; de la toma del Poder de Arriba a la creación del poder de abajo; de la política profesional a la política cotidiana; de los líderes, a los pueblos; de la marginación de género, a la participación directa de las mujeres; de la burla a lo otro, a la celebración de la diferencia.

No me extenderé más sobre esto, porque ha sido precisamente el curso “La Libertad según l@s zapatistas” la oportunidad de constatar si en territorio organizado vale más el personaje que la comunidad.

En lo personal no entiendo por qué gente pensante que afirma que la historia la hacen los pueblos, se espante tanto ante la existencia de un gobierno del pueblo donde no aparecen los “especialistas” en ser gobierno.

¿Por qué les da terror el que sean los pueblos los que manden, los que dirijan sus pasos propios?

¿Por qué mueven la cabeza con desaprobación frente al mandar obedeciendo?

El culto al individualismo encuentra en el culto al vanguardismo su extremo más fanático.

Y ha sido eso precisamente, el que los indígenas manden y que ahora un indígena sea el vocero y jefe, lo que los aterra, los aleja, y finalmente se van para seguir buscando alguien que precise de vanguardias, caudillos y líderes. Porque también hay racismo en la izquierda, sobre todo en la que se pretende revolucionaria.

El ezetaelene no es de ésos. Por eso no cualquiera puede ser zapatista.

(...)

Necesitábamos tiempo para ser y para encontrar a quien supiera vernos como lo que somos.

Necesitábamos tiempo para encontrar a quien nos viera no hacia arriba, no hacia abajo, que de frente nos viera, que nos viera con mirada compañera."

sábado, 7 de junio de 2014

Libre

Acá va un genial texto del ya reincidente en este espacio Santiago Alba Rico. Muy apropiado además para estos tiempos que corren:


El viento escapa entre los barrotes

Por un momento pareció finalmente vencido. Detenido en la ciudad de El Paso mientras levantaba del suelo un clamor de hojas, fue conducido el pasado viernes a prisión y encerrado en una celda de alta seguridad. Pero la alegría ha durado apenas unas horas. Ayer por la mañana el viento se coló por los barrotes, recorrió las galerías arrancando las gorras a los carceleros, salió al patio con bufidos de felino e irrumpió en la biblioteca, donde pasó una a una todas las páginas de un gran tomo que acababa de abrir sobre la mesa un prisionero mexicano acusado de terrorismo. Después de leer el libro, el viento salió a la calle por la ventana del despacho del director –tras ordenarle todos los papeles– y se lanzó al desierto en libre y restallante galopada.

Según informa nuestro corresponsal, en las últimas 24 horas el viento ha recorrido todo el territorio de EEUU, de Texas a Alaska, arrancando de los mástiles todas las banderas, las cuales vuelan por encima de las ciudades, como una bandada de barras y de estrellas, para ir a precipitarse al mar de Bering. Desteñidas por el agua, los esquimales las recogen y las convierten en cometas del color del cielo. “Hacen juego con el hielo, que es una enorme bandera blanca”, ha declarado uno de ellos.

Por el camino, el viento ha dado la vuelta a todos los espejos, derribado las puertas de doce bancos, volcado un convoy militar, repartido libros y pañuelos en la periferia de Detroit, recolocado las tejas de la casa de Camila Jackson, arrojado un cubo de basura al paso del gobernador de Ilinois y trasladado al electricista William Piston, que llegaba tarde, hasta Dakota del Norte, donde le esperaban para empezar un nuevo mundo.

Europa se encuentra en estado de máxima alerta.

jueves, 5 de junio de 2014

Paciencia española

“España no ha adoptado nunca la moderna moda francesa, tan en boga en 1848, de comenzar y acabar una revolución en tres días. Sus esfuerzos en este línea son complejos y más prolongados. Tres años parece ser el plazo mínimo que se impone el país a sí mismo, mientras que el ciclo revolucionario se extiende a veces hasta nueve”. 

Esto lo dijo un tal Marx hace ya unos cuantos años. Y luego la historia le ha venido dando la razón de manera persistente.

15M del 2011. Ahí comenzó a moverse la cosa... Cuidado

martes, 3 de junio de 2014

Cantando sin querer


Una gozada ponerse a leer este libro de Arnold Lobel y descubrirse cantando, riendo, entrelazando guirnaldas en forma de microhistorias para armar una buena fiesta. Uno de los libros más divertidos que he leído hasta ahora con mi hija. No dejéis pasar la oportunidad de echar un ojo y, sobre todo, leerlo en voz alta"El libro de los guarripios"




domingo, 1 de junio de 2014

No todo es común

Ahora que anda tan de moda el tema de la innovación social, conviene señalar que no todo es lo mismo, como se explica en este artículo aparecido en Diagonal. Muy interesante.

Palets, sensores y la innovación social sin comunidad




En las jornadas sobre innovación social que acontecieron en recientemente en Zaragoza bajo el sugerente título de “Destrucción Creati­va” se hizo evidente que hay dos formas muy diferentes de entender la denominada innovación social. Este paradigma, que ha devenido central en los programas políticos y planes de desarrollo contemporáneos, postula que la sociedad en su conjunto puede entenderse como un ente capaz de solucionar problemas que acontecen en el entorno urbano. Por ello, las administraciones han promovido encuentros, ayudas y la crea­ción de espacios destinados a que los agentes sociales busquen soluciones a problemas que por lo general no han creado ellos mismos. Bajo la guisa de la participación, en el fondo lo que se promueve es que la ciudadanía asuma competencias que hasta ahora eran del Estado, pero que debido a los recortes y al auge de políticas de corte neoliberal han acabado siendo externalizadas al cuerpo social. Si en el proceso de solucionar estos problemas, uno es lo suficiente aguililla como para sacarse unos euros, el ciclo de la innovación social se da por culminado.


Con este enunciado de la innovación social vemos que se agrupan antiguas ONG que han tenido que cambiar su modelo de negocio y auparse a la ola del “solucionismo”, espacios de coworking que intentan poner en positivo el hecho de que los precios de los alquileres obliguen a los autónomos a compartir mesa con otros trabajadores precarios, o todo el fenómeno de las smart cities, es decir, la lógica del “solucionismo” tecnológico puesta al servicio de mejorar las infraestructuras urbanas. Ciudades tan listas que centran toda reflexión en torno a la eficacia, desplazando así debates en torno a la desigualdad o el derecho a la ciudad. Sensores, dispositivos de recolección de datos, mesas compartidas, palets y tecnologías de control se ponen al servicio de la mejora del funcionamiento de las grandes urbes. Una legión de personas bienintencionadas y sus cacharros dispuestos a resolver problemas que no tuvieron la oportunidad de definir. Se deriva de esta lógica una idea problemática: los derechos ya no son fruto de conquistas colectivas, sino que uno se los ha de ganar de forma individual. Una competición por mejorar lo social.