Acaban de salir los resultados de la Encuesta de Condiciones de Vida del INE, y una de las cosas que llama la atención es que la pobreza aumenta. De un 20,7% en el 2010 a un 21,8% en el 2011. Y si aplicamos el nuevo indicador aprobado en Europa sobre pobreza y exclusión social las cifras suben...
Parece que nada sorprendente, dado que en estos tiempos de crisis no se podía esperar otra cosa. El problema es que esta encuesta lo que indica no es que hayan bajado los ingresos (que también, pero si lo hacen de manera equlibrada al final el mismo porcentaje se sitúa por debajo del 60% de los ingresos medios), sino que han aumentado las desigualdades. Y que este aumento de la pobreza no es algo nuevo, propio de la nueva situación dada desde el 2008, sino que ya se venía dando en los años de bonanza económica anteriores, como se puede constatar consultando el Barómetro Social de España:
No se trata de crecimiento o no crecimiento, ni siquiera de economía. Se trata de justicia social y derechos humanos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario